miércoles, 18 de octubre de 2023

Cierres y tranques

Hace 50 años los panameños aprendimos que la única forma que atiendan tus necesidades como grupos, profesionales o comunidad es deteniendo la circulación vial o haciendo un tranque, lo que nos trae a señalar que la connotación que le damos a este palabra, según la RAE, solo la tiene Cuba y Panamá.

Aprendimos mal y lo hemos estado haciendo mal, porque no podemos pedir nuestro derecho en detrimento de los derechos de los demás.

Esto es pueblo contra pueblo, ya que a quienes no le permitimos llegar a donde van es al pueblo, debido a que los mandatorios, ministros y otros directivos gubernamentales son avisados para que tomen otras vías y en última circunstancia no llegan a donde tenían que ir y no pasa nada, porque ellos son los que mandan.

Desde el martes nos enfrentamos a una nueva jornada de protestas en rechazo por el proyecto de ley del contrato entre el país y Minera Panamá. Y todos somos los perjudicados, porque la gente de la Minera está feliz en su mina o en su casa, pero nosotros que tratamos de llegar a nuestro trabajo, nuestras citas médicas, a un puerto o aeropuerto tenemos que pagar “los platos rotos”.

Si saben quién los firmó, si saben dónde viven los directivos de la Minera y los que podrían aprobar el proyecto de ley… por qué no van a sus casas y sus oficinas a hacer el tranque.

¿Qué tenemos que ver nosotros con esto? Más allá de haber elegidos a malos diputados, pero que prometemos no hacerlo… más!

Pero eso lo digo… solo por joder!


OPRTV-9

8 comentarios:

  1. Recientemente, hemos sido testigos de protestas contra un proyecto de ley que involucra un contrato entre el país y Minera Panamá. Todos resultamos perjudicados por estos bloqueos, mientras que los empleados de la minera continúan su labor sin problemas. La pregunta que surge es por qué no se dirigen a las casas y oficinas de quienes tienen el poder de tomar decisiones en lugar de afectar a ciudadanos que no tienen ninguna relación con el asunto.

    En lugar de confrontar a quienes tienen el poder y la capacidad de tomar decisiones, a menudo terminamos enfrentándonos entre nosotros mismos. Los líderes gubernamentales y los funcionarios son informados de estos bloqueos y, en última instancia, no se ven afectados. Esto crea una división entre el pueblo y no resuelve los problemas.

    Cerrar carreteras como una forma de protesta puede ser efectivo para llamar la atención sobre cuestiones importantes, pero no es la solución completa. Necesitamos ir más allá de los bloqueos y los tranques para abordar los problemas de raíz que enfrentamos. Esto implica participar activamente en el proceso político, ejercer nuestro derecho al voto y presionar a nuestros líderes para que aborden las preocupaciones de la sociedad de manera efectiva.

    Si bien los bloqueos pueden destacar una problemática, no deben ser la única herramienta de cambio.

    Es evidente que, mientras la mina continúa operando sin problemas, las acciones de bloqueo y protesta en las carreteras solo generan más divisiones y conflictos entre los ciudadanos. Esto resalta la necesidad de encontrar formas más efectivas de abordar los problemas y preocupaciones en la sociedad.

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  2. Los bloqueos viales en Panamá o como le decimos "los tranques" por las protestas constantes últimamente, son una fuente de frustración comprensible. A menudo, esta forma de protesta perjudica a la población en general en lugar de a quienes toman decisiones clave. Se necesita una revisión urgente de cómo expresar las preocupaciones de manera más efectiva sin afectar negativamente a la comunidad.

    Es entendible que, con el tiempo, los panameños hayamos llegado a creer que esta es la única manera de ser escuchados. Pero es importante reconocer que los perjudicados son en su mayoría ciudadanos comunes que simplemente buscan llegar a su trabajo o sus compromisos cotidianos, como lo dice el artículo es "pueblo contra pueblo" lastimosmente. La pregunta válida que surge es por qué no dirigir estas protestas hacia los responsables directos, como líderes empresariales o políticos que toman decisiones clave.

    La responsabilidad cívica en la elección de representantes es esencial. Es fundamental encontrar formas alternativas y menos perjudiciales para expresar legítimas demandas. La lucha por los derechos y la justicia debe evolucionar hacia un enfoque más constructivo y menos perjudicial para la sociedad en su conjunto. En fin, hay que hacer reflexión sobre cómo abordar los problemas y construir un futuro más armonioso en Panamá.

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  3. Ariel Atencio 8-981-1169

    Siento que es un pensamiento que muchos hemos tenido más de una vez desde hace mucho tiempo y que por alguna razón no les entra en la cabeza a las personas que hacen estás huelgas. Me he topado en blogs con comentarios como "Ellos tienen los huevos para luchar por tu país mientras tú te quejas" y demás de ese tipo. Pero la cosa no es menospreciar la lucha, de hecho es algo que se debe hacer, y tampoco es encontra del método, el asunto aquí es que lo están ejecutando de la manera y en el lugar incorrecto.
    Al final su lucha no sirve de nada porque las personas al poder se salen con la suya, pues a ellos ni les afectó. Lo único que logran es dañar al pueblo, que pierde horas de trabajo ($) porque no cualquier trabajo te acepta una excusa de "cierres", que terminamos perdiendo días de estudios porque en lugar de hacer el cierre en la asamblea o en la casa de los implicados, deciden hacerlo en la Universidad de Panamá que nada que ver, solo por joder.

    Uno entiende la lucha y entiende el problema, pero hay que ser sinceros en esto ¡Nos están jodiendo!

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  4. Mas allá del tema del contrato minero creo que la mayoría de los panameños estamos cansado de otros temas y estamos asqueado de la corrupción, que por varios periodos nos han perjudicado a todos los panameños. Y si es cierto que estamos en una lucha pueblo contra pueblo, pero creo que de alguna manera también les abre la mente a las personas de el problema en la cual vivimos y que todos estamos contra un solo fin. Y también es cierto que somos nosotros mismo quienes nos perjudicamos, pero creo que es la única manera en la que un pueblo de clase media baja puede alzar su voz.
    La Pregunta del porque los panameños no vamos a la casa o residencia donde vive el presidente, es porque obviamente sabemos que el presidente no reside en esos lugares, y también por otro lado creo que no es solamente con el presidente, si no con todos los diputados se dieron su voto para que este contrato de ley se aprobará y también se hacen este tipo de protesta es para que todo el pueblo tome conciencia a la hora que le toque ir a una sola de votación.
    Julio González 8-980-2335

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  5. Estoy completamente de acuerdo con el blog, entiendo que las protestas son para ayudar al país pero nos están afectando como pueblo, el cierre de vías principales que nos ayudan a movilizarnos a nuestros lugares de trabajos, escuelas, universidades, citas médicas etc. son importantes, personalmente opino que si quieren protestar que sea en lugares donde trabajan las personas que afectan a nuestro país. Ya que cerrar vías donde muchas personas que trabajan y quieren salir adelante están siendo afectadas.
    Como país deberíamos ayudarnos y no afectar a los demás ya que el cierre de calle solo está afectando al pueblo no a las verdaderas personas que están vendiendo nuestro país. Siento que como pueblo está decisiones de cerrar calles y no dejar pasar a las personas es una mala decisión de los protestantes, siento que no se ponen a ver cómo estas acciones en verdad afectan a los demás, personas que van para sus trabajos o regresan de el trabajo cansados, si van hacer protestas al menos dejen algunas vías libres para las personas que tienen que llegar a su lugar de destino.

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  6. las preocupaciones van mucho más allá del contrato minero. Estamos viviendo un período de ineficiencia y falta de transparencia por parte del gobierno, lo cual es notorio en múltiples aspectos. La corrupción, por desgracia, es una triste realidad en nuestro país y un tema que afecta profundamente a la sociedad. La falta de rendición de cuentas y la opacidad en la toma de decisiones gubernamentales solo aumentan nuestra frustración.

    Además de las cuestiones relacionadas con la minería, estamos cansados ​​de ver cómo se desperdician los recursos públicos, cómo los servicios básicos son deficientes, y cómo la burocracia y la corrupción impiden el progreso. Nos sentimos abandonados por nuestros representantes, quienes parecen olvidar que están en el cargo para servir al pueblo.

    La situación es desalentadora, pero es importante recordar que como ciudadanos tenemos el poder de exigir un cambio. La participación activa en la política, la transparencia en el gobierno y la lucha contra la corrupción son desafíos que debemos abordar juntos. Debemos unirnos para presionar a nuestras autoridades y responsabilizarlas por sus acciones. Solo a través de un compromiso colectivo podemos lograr un gobierno que realmente trabaje en beneficio de todos los ciudadanos.

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  7. La situación actual de Panamá se está saliendo de control. No contamos con un gobierno imparcial que escuche al pueblo cuando este habla. A las malas hemos aprendido que el camino para alzar nuestra voz y ser percibidos es mediante el cierre de calles y protestas. El problema es que no nos damos cuenta a quienes realmente estamos dañando, ¿qué es lo que queremos con estos cierres?

    Existen muchas razones por las cuales el pueblo quiere, necesita y se expresará. Razones importantes que necesitan ser gritadas para ser atendidas, pero el gobierno no sede a que el pueblo es primero, por ese motivo, es más fácil mandar un grupo de policías antimotines a lastimar a las personas en la marcha.

    Lamentablemente, expresar nuestra opinión en este país, independientemente que todos tengamos los mismos intereses, significa quitarles la oportunidad a nuestros compatriotas, es decir, afectamos a cierta parte de la población que necesitan seguir trabajando o estudiando. Aunque estas marchas sean para un bien a futuro.

    ¿A quién realmente estamos dañando? A nosotros mismos. Obviamente, es triste ver como los panameños nos ponen en contra unos con otros y la mayoría de los directivos de la minera First Quantum Minerals siguen tranquilos en sus hogares, observando con sus familiares como el país, se alzan contra ellos, pero aun sin resolver el problema.

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  8. Las protestas contra contratos mineros suelen estar relacionadas con preocupaciones ambientales, sociales y económicas. Los panameños a menudo argumentan que la minería puede tener impactos negativos en el medio ambiente, las comunidades locales y la distribución justa de los beneficios económicos, lo que si es cierto que no hay protestas que no sea apoyada, ya que las mismas son para el bienestar de nuestro país.
    Los panameños no tienen mal vistas los cierres de calle ya que es el medio por el cual el pueblo puede ser escuchado, y esto se a notado a lo largo de los años.

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